Unos labios rojos, una extraña fiebre que te cambian la vida
El problema es que esta vascultis –inflamación por un efecto patógeno del sistema inmune- puede dejar tocadas las arterias coronarias y, en un pequeñísimo porcentaje, llevar a niños pequeños a sufrir infartos de miocardio.
La familia de Judith tardó 10 días en recibir el diagnóstico de que Fernando padecía un caso de Kawasaki: “Entonces le pusieron un cóctel de fármacos a base de gammaglobulina y cortisona y le comenzaron a bajar la inflamación y la fiebre.” A Fernando le habían hecho multitud de análisis, incluso una punción lumbar por si era meningitis.
Last Updated on 1 diciembre, 2022 by Asenkawa